Huérfano a una edad muy temprana, Gui, un estudiante de ingeniería de cuarto año, ha tenido que trabajar duro y ganar para sí mismo desde que tiene memoria. Aún así, todavía tiene un comportamiento suave y una sonrisa en su rostro. Solo, un estudiante de primer año en la Facultad de Música, puede obtener lo que quiera con un simple chasquido de dedos. Dinero, fama, buen aspecto, el chico lo tiene todo, excepto su sonrisa. Cuando la madre de Solo falleció, ella se llevó con él su sonrisa. Nada podría llenar este agujero perdido en él, hasta que un día ve a un chico sonriente trabajando en un café. Una noche, los dos mundos chocan en una pequeña cafetería. Por una taza de leche caliente y una cálida sonrisa, Solo se encuentra de regreso en el café todas las noches. Para un chico suave que le recuerda a un husky, Gui se encuentra esperando a un visitante nocturno con una taza de leche caliente, noche tras noche. Los dos muchachos continúan reuniéndose. En el mismo lugar, al mismo tiempo, hasta que pronto se dan cuenta de que se han convertido en la respiración del otro. Una necesidad. Al igual que el oxígeno.
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